¿Existe el crecepelo milagroso?
Uno de los mayores traumas estéticos es la pérdida de pelo. Y es que estar calvo dista mucho de ser un proceso natural. Importa y afecta de manera muy personal a nuestro ego y autoestima, aunque muchos hayan dicho en algún momento: “¡bah!, si me quedo calvo o tengo poco pelo me afeito toda la cabeza y listo”. Pero lo cierto es que eso no es así, desde el mismo momento en el que vemos los primeros síntomas tomamos medidas. Lo primero se trata de camuflar “el problema” con peinados imposibles o estratégicos.
Cuando las entradas comienzan a ser muy notables, la táctica es dejar crecer el pelo para intentar disimularlo. Cuando la alopecia comienza por la coronilla lo ideal es dejar el pelo largo para peinarlo todo hacia atrás, aunque siguen existiendo los incondicionales de la cortinilla, que son los ultimísimos en resignarse. El segundo paso es buscar, y rápido, un remedio que ponga fin a la indeseada calvicie. Tranquilos, para eso ya hay en el mercado una interminable lista de productos crecepelo milagrosos que en un santiamén te harán tener una cabellera frondosa. Y es que estos son el timo más antiguo del mundo. Prometen, prometen y con el paso de los días no hay más pelo, hay menos. Uno de los más conocidos es Pilexil. Promete frenar la caída del pelo, fortalecerlo y repararlo gracias a los cuatro productos milagrosos que lo integran. Tras finalizar el tratamiento y con unos cuantos euros menos en tu bolsillo, resulta que estás como al principio: intentando buscar una solución, un remedio para la evitar la traumática y definitiva caída del cabello. Más controvertido es Finasterida, que presenta una composición revolucionaria que hunde sus raíces en la medicina moderna desarrollada por Hipócrates, quien por cierto acabó calvo. Al final, como el resto de las propuestas, solo resultó ser un placebo más y caro. Lo cierto es que la caída del cabello tiene unas causas concretas, que en cada persona son diferentes.
Los factores genéticos influyen de manera definitiva y si tienes familiares con alopecia tienes una alta probabilidad de quedarte calvo. También situaciones de estrés, físico o emocional continuado pueden provocar la caída del pelo. En otras ocasiones, la calvicie es provocada por enfermedades o infecciones graves, por dietas drásticas escasas de proteínas o por la ingesta de fármacos del tipo de pastillas anticonceptivas, antidepresivos, retinoides o fármacos bloqueadores del calcio. Los cambios hormonales, anemias y un mal trato del cabello también son causas que pueden hacerte perder pelo. Como puedes ver la alopecia tiene múltiples causas y cada caso es diferente, por ello lo aconsejable es que acudas a un especialista. Olvídate de cápsulas, ungüentos, sprays y demás productos promesa y acude a centros especializados donde personal cualificado estudiará tu caso y te aplicará un tratamiento adecuado a tus necesidades.
Actualmente, el microinjerto capilar es la solución para los que se resisten a quedarse sin pelo. El tratamiento consiste en trasplantar pelo desde las zonas no afectadas por la alopecia, como es el caso de la nuca o ambos lados de la cabeza, a las zonas despobladas de cabello. Este, al no estar afectado genéticamente en el folículo, no se caerá y, pasados unos meses, comenzará a crecer. Es una microcirugía realizada por profesionales que te garantizarán una solución permanente. Existen varias técnicas de microinjerto, por ello antes de comenzar siempre te realizarán un examen capilar y un estudio de tu historial clínico para determinar tu tipo de alopecia y la viabilidad de una técnica u otra. Es un tratamiento adaptado a ti, con el que no tendrás que creer en milagro. ¿Sigues pensando que existe el crecepelo milagroso?
Fuente Yliana RomeroDirectora General Q-ME
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